"Y ponerse un límite es como atarse los cordones.
Hay que dibujar la falta de horizonte y marcar bien derechito:
cuándo uno dice basta, cuánto se esta dispuesto a sufrir y cuánto a amar.
No quebrantar el juramento a ser mas vil o menos villano, sólo pensar con dedos fríos...
Que no me gusta escribirte cuando estas despierta ni despedirte en la puerta.
Toma mi mano y usala, que te sirva de guía y de regla,
en esa ardua tarea de decir basta cuando sobran las palabras,
y delinear el trazo cuando la angustia mata..."
Cl.
Hay que dibujar la falta de horizonte y marcar bien derechito:
cuándo uno dice basta, cuánto se esta dispuesto a sufrir y cuánto a amar.
No quebrantar el juramento a ser mas vil o menos villano, sólo pensar con dedos fríos...
Que no me gusta escribirte cuando estas despierta ni despedirte en la puerta.
Toma mi mano y usala, que te sirva de guía y de regla,
en esa ardua tarea de decir basta cuando sobran las palabras,
y delinear el trazo cuando la angustia mata..."
Cl.
Profesionalmente hablando el limite es la angustia, es el dolor importable de saberse inútilmente vivo. El limite es la herida que causa la conciencia de verdad, el desconcierto de la razón. El limite es el llanto quemando en el pecho, pujando en la garganta. El limite es él, el limite es ella.
Gr.
Gr.
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